Se acaban de ir mis amigos de casa, ha sido una buena noche y me dejan sin sueño.
voilá
5 chicos condenados a la horca en Irán por ser homosexuales.
Atención a la segunda imagen:
Esta madre perdonó al asesino de su hija segundos antes de ser ahorcado. Aunque el asesino se quitó la pena de muerte, recibió otra sentencia. Gracias a la bondadosa madre.
Curioso, los dos casos en un mismo país.
-Atención humanos, podemos exterminar gente por su condición sexual, clase social, religión, raza...
...Y también podemos perdonarle la vida a asesinos...
¿Cuántas vueltas da la vida eh?, pero bueno, como no nos sentimos identificados con ningún caso pues no le damos importancia alguna.
Gracias a la constante emisión de violencia gratuita y despreocupación llegamos al punto en el que la única vida humana que nos importa es la nuestra.
Vemos a diario ejecuciones en la televisión, somos conscientes de que cada 3 segundos un niño muere por desnutrición, personas inocentes son mutiladas por sus gobiernos, asesinan a personas por motivos religiosos...
¡¿Qué locura es esta?!
Pero eh, relax, que lo peor no puede ser que arrebaten vidas , sino que a nosotros nos importe una mierda que las arrebaten siempre y cuando no nos veamos afectados.
¿Que mueren mujeres por ser mujeres ya que son "inferiores a los hombres"?
-Para qué indignarme, yo no estoy muerta.
¿Que mueren homosexuales por nacer así?
-Para qué indignarme, no soy un maricón de esos.
¿Que asesinan brutalmente a Marta del castillo?
-Para qué indignarme, no sabía quién era ella hasta que murió.
¿Que murieron millones de Judíos en el holocausto Nazi?
-Para qué indignarme, yo soy cristiana.
¿Que mueren afroamericanos por el KKK?
-Para qué indignarme, yo soy blanca.
¿Que mueren millones de niños por no comer?
-Para qué indignarme, que busquen comida que yo como todos los días.
Las vidas no nos importan, incluso si muere alguien en manos de otra persona, queremos quitar la vida del asesino para compensarla. ¿No era suficiente con una?
Estas cosas verdaderamente me hacen llorar, sí, llorar.
Pensar que podría estar en una horca sin que ninguna madre me podría perdonar la vida, porque me odia, todos en ese instante lo único que desean es mi exterminio.
Podría estar colgado del cuello en algún lugar de el mundo y sin que vosotros notarais mi muerte.
Si no lo haceis por lo que veis, ¿Quién va a decir que lo hareis por mi?
Hacedme el favor y empezad a valorar las vidas de los demás, tanto como la vuestra.
Empezad por sentir dolor por una muerte lejana, simplemente por ser una muerte.
Empecemos a valorar las vidas de las personas que estan tanto cerca como lejos, porque sean quienes sean, merecen nuestro respeto.
Me despido con la soga al cuello, por maricón .
